-> Se lavan los champis secándolos bien para que tengan el menor agua posible
-> Se cortan en trocitos
-> Se corta también en cuadrados la cebolla y el jamón
-> Pochamos la cebolla hasta que esté bien blandita
-> Añadimos el jamón y damos unas cuantas vueltas
-> Añadimos los champiñones. Éste es el punto más importante, hay que hacerlos hasta que se evapore todo el agua que sueltan, sino se queda muy aguado y no está bueno
-> Añadimos los huevos o claras a elección, pero sin batir, directamente y vamos removiendo
-> Según lo cuajado que te guste, lo dejamos más o menos rato. A mí no me gusta muy cuajado, así que enseguida lo saco para que se quede con un poquito de liquido como en la foto
-> Espolvoreamos oréganos por encima y a disfrutar!
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